lunes, 20 de abril de 2015

A LAS GENERACIONES VENIDERAS.


A LAS GENERACIONES VENIDERAS



La historia nos ha contado a todos los pueblos del planeta de donde procedemos pero la historia al haberla hecho nosotros los habitantes de la tierra, nos dio el derecho también al ser protagonistas de ella para poder escribir nuestro destino, aquel que nos permitirá avanzar por el camino de la superación y en la búsqueda de los mas grandes ideales que persigue la humanidad en el compromiso de ser cada día mejores seres humanos.


Pero ese destino que debemos escribir en la búsquela de nuestra identidad como seres humanos, debe empezar por reconocer en nosotros mismos la capacidad que tenemos para poder comprender ¡que somos! para ser nosotros mismos en nuestra capacidad de ser, de pensar de sentir y de actuar, y de esta manera con el conocimiento de uno mismo poder llegar a una comprensión mas identificada de nuestros semejantes que como vosotros también son seres que tienen las mismas capacidades para poder unirnos en una sola idea y comprender porque estamos en este mundo, y reflexionar entonces el porque de tantas “diferencias” en nuestras formas de pensar. No somos capaces de entender todavía que los seres humanos somos una raza, que debe empezar por encontrar el camino de la comprensión y el entendimiento total, para tener un solo pensamiento que nos lleve a mayores conocimientos en la búsqueda del ideal humano, para una cabal compresión de lo que somos y que queremos para mejorar la condición humana y hablar en el futuro como raza humana y no identificarnos por el color de nuestra piel o nuestra procedencia para identificarnos como muy pobres, pobres, medianamente acomodados o ricos y millonarios.

La búsqueda de la identidad debe empezar por cada pueblo y en cada generación para

saber de donde procedemos y que es lo que somos en el lugar que nos toco nacer, para poder vivir y sentirnos orgullosos de ser seres humanos. Porque cada pueblo se identifica por sus raíces y son estas la que nos ligan a nuestra propia gente que son parte de ese pueblo al cual pertenecemos y al cual necesitamos decirle que si, que somos iguales, porque tenemos una misma raíz una misma procedencia y que esta identidad debemos aceptarla con orgullo y satisfacción porque es lo que nos identifica como pueblo y como nación.

Pero esto que en muchos casos es difícil de aceptar hasta ahora en muchos pueblos del planeta, es el compromiso que deben asumir las generaciones venideras para que puedan encontrar sus raíces en sus pueblos y luego unir estas raíces de identidad en una sola raíz de identidad como seres humanos.
El camino que tienen que recorrer las generaciones venideras es largo, el trabajo arduo, difícil pero con la gratificante satisfacción de caminar en un solo sentido para la consecución de un solo fin, unificar la raza humana.

Generaciones venideras, tienen en su poder la llave que debe abrir las puertas del futuro, pero al cerrar las puertas del pasado deben mirar hacia atrás, y si dejaron algo inconcluso deben regresar para
que puedan terminar la misión que como seres humanos hemos asumido de ser cada vez mejores.
Deben educar a cada uno de sus pueblos en todos aquellos prejuicios que aun mantenemos y que nos hacen colocar barreras entre los seres humanos, racismo, discriminación, vandalismo, explotación, corrupción, caudillismo, incomprensión, indiferencia, fundamentalismo, y todos los males de nuestra raza.

Educar a cada pueblo para que en su propia identidad puedan superar todos estos rasgos negativos y enrumbar hacia un solo norte que nos de las pautas para un entendimiento que nos permita darnos la oportunidad de mejorar sistemáticamente en nuestro desarrollo personal, este es un reto que deben asumir.
Si en cada hogar empezaran por hacer realidad estos cambios, entonces cada barrio, cada asentamiento humano, cada aldea, caserío, comarca, pueblo, ciudad, país, continente y la tierra como planeta, deberán escuchar y llevar a la práctica este mensaje que las generaciones venideras lo deberán asumir como un compromiso de libertad, para que nuestras mentes se liberen de todo pensamiento egoísta e individual , para pensar y actuar por encima de todas las cosas de una manera solidaria y de esta forma unir nuestros pensamientos y nuestra actuación para lograr una unidad a nivel mundial que nos permitirá por fin tener un hogar común para todos los seres humanos que se llame, Tierra.

Generaciones Venideras esta es su lucha, este es su compromiso, este es su reto, enfrentarlo ahora para que puedan vivir mañana en un solo hogar con un solo idioma y con una sola identidad que nos reconozca definitivamente como seres humanos y como terrícolas, es lo que deseamos para nuestros hijos, nuestros nietos y las generaciones que seguirán llegando.

Esta es su misión, empiecen por liberarse y liberar a la humanidad, ahora!

En un día en el tiempo: Hego Arrunátegui Espinoza.

viernes, 3 de abril de 2015

LA FE NUESTRA DE CADA DÍA.



      LA  FE  NUESTRA  DE CADA  DÍA 
Amanece un nuevo día, y despertamos a el a veces con un  poco de desgano, suele suceder, porque los sueños tenidos esa noche de repente no fueron nada agradables, pero aun así, nos levantamos y nos alegra esa luz maravillosa de un día, que sin pensarlo percibimos que será bueno.


Nos levantamos casi como si estuviéramos programados, que cada cosa que hacemos obedece a un ritual de todas las mañanas que lo seguimos y lo hacemos hasta con los ojos cerrados. Después de esto  nos cae la consciencia para decirnos lo que  en realidad tenemos que hacer como una responsabilidad por ese día.

Si cada día fuera tan sencillo de ser llevado sin que se nos presentara ninguna dificultad, y sin que nadie nos apoye, seria el día perfecto, pero, en ese tiempo que nos lleva llegar a nuestro destino nos formulamos, a veces, una serie de conjeturas acerca de lo que estamos realizando hasta ese momento, y nos damos cuenta que cada cosa que hacemos no es sólo nuestra, sino que la compartimos con otras personas que persiguen el mismo ideal de entregar nuestra vida en ayudar a otros seres humanos a encontrar el camino que perdieron porque la fe que tuvieron no fue tan  sólida como el amor que tenemos a quienes  más queremos.


 
Entonces, que es aquello que nos anima a realizar tantas cosas que ayuda a levantarnos todos los días? no es acaso la afirmación del ideal que tenemos de entregar nuestra confianza, de afianzar nuestro convencimiento en la tarea de todos los días de tener fe en lo que hacemos, de creer en nosotros y en nuestra convicción de que la fe nuestra es tan poderosa como la fe de  creer en que todo lo podemos realizar con la seguridad y la afirmación de la fe en cada cosa realizada.


Ese es el poder de la fe nuestra de todos los días, el de tener la certidumbre de que todos nuestros actos tienen la pasión de creer, la pasión de la fe y la creencia infinita y divina de que una mano extendida  nos ayudará a fortalecer la fe nuestra de todos los días, y con la esperanza de que todo saldrá bien, con la convicción que tenemos en nuestra fe de creer y de amar.

En un día como hoy: Hego Arrunátegui Espinoza


EL PODER DE TENER PODER


           EL PODER DE TENER PODER

La vida es una lucha permanente para lograr algo que se nos ha enseñado desde pequeños, y esto se explica en el hecho en que nuestros progenitores nos van mentalizando en lo que te convertirás en el futuro, y estas lecciones se nos dan todos los días de nuestra infancia, pubertad y adolescencia.


Se hace tan insistente esta forma de imponer un modelo en nuestros hijos que los hacemos obedecer siempre en lo que queremos hasta que ellos van aceptando ese tipo de modelo solo por qué papá y mamá así lo quieren por nuestro propio bien, para que cuando seamos grandes tengamos todas las cosas y no nos falte nada.



Es en esta etapa de nuestra vida que también se nos va inculcando la obligación de ser siempre los primeros en todo, nunca segundos, si no traes una buena nota no habrá premio, pero si castigo, que de alguna forma nos va forjando un carácter fuerte y una personalidad imponente que solo está preparada para ganar. Todo esto no es malo, pero, lo que ha faltado en esta educación es no  haber enseñado a nuestros hijos que no todo es triunfo, sino, que hay momentos en cada una de nuestras vidas que debemos  enfrentar las decepciones o frustraciones, hechos para los cuales no fuimos preparados.


Sin embargo cuando el tiempo va pasando nos encontramos ya con nuestra empresa formada o el puesto que siempre aspiramos tener, de ser gerentes, administradores de recursos humanos o jefes. Es desde aquí en que nuestra vida empieza a cambiar cuando lo tienes todo ante ti y el tiempo para demostrar a todos que eres el mejor y que contigo deben andar con cuidado y realizar tu labor a la perfección.



Toda empresa brinda un servicio que ante toda circunstancia tiene que ser muy bueno porque de el depende el éxito de la empresa que manejas o gerencias. El recurso humano que labora en una empresa tambien esta preparado para cumplir con las exigencias de una entidad muy seria y responsable en el servicio que ofrece. 
Todo esto enmarcado en que existe una legislación laboral que se debe cumplir para tener a un trabajador sin problemas y con un alto nivel de productividad, para de esta  manera contar siempre con sus servicios.


La empresa sigue funcionando cuando su personal cumple bien con sus obligaciones, pero, cuando uno de ellos se enferma y no asiste a laborar, empiezan entonces los problemas, se exige los documentos por enfermedad que su seguro médico le da y los entrega al gerente de recursos humanos. Pero, se le dice que se espera que esto no vuelva a ocurrir, pues esto queda como un mal antecedente, o sea que le dijeron que estaba prohibido enfermarse.



Por otro lado, por una cuestión circunstancial llega con retraso, recibe un llamado de atención con la indicación innecesaria de una más y te vas. Nace así la prepotencia de espiar que es lo haces y como lo haces, porque no puedes dar malos ejemplos. Y esto no es un solo caso, sino, que las situaciones de problemas familiares en el personal son diversas y se presentan de manera inusitada y esto te obliga a producir menos, estando enfermos o con un familiar en situación difícil.


Es en esta situación en que el acoso laboral se torna insostenible para muchos trabajadores, y empiezan a trabajar y no producir lo adecuado por la permanente amenaza de perder el trabajo y dejar sin sosten a su familia. Aquí ya  no  importa la ley, sino solo el poder de hacer y deshacer las  cosas, el poder que te da el poder de tenerlo todo sin pensar que  esa persona a quién despides colaboró con su esfuerzo para que la empresa tuviera mayores dividendos y mejor reconocimiento empresarial.



Lamentablemente en decenas de casos, esta figura se hace cotidiana porque te educaron para no tener ese tipo de sentimientos solidarios, ni comprensivos, sino, para ganar y siempre ganar sin importar a quién amenazas, o a quién despides.



El poder de tener poder te da la  libertad de poder disponer del trabajo y de la vida de un ser humano, que para el empresario, dueño o patrón, solo eres un recurso disponible y desechable y nada más, pues lo importante para el, es que su inversión le revierta cada día solo más y más dinero, pues para eso lo prepararon, pero, el trabajador y el profesional, se quedan siempre con lo más valioso, y es su libertad de decidir y elegir donde trabajar.



En un día como hoy 03 de abril del 2015: Hego Arrunátegui Espinoza.