sábado, 28 de junio de 2014

AMO MI VIDA


 
                                              AMO MI VIDA
                                               


AMO LA VIDA, COMO AMO MI MUNDO, AMO A LOS MÍOS

COMO AMO A MI PATRIA, AMO MIS MOMENTOS 

DICHOSOS, COMO AMO LOS MOMENTOS BELLOS EN 

FAMILIA, AMO LOS DÍAS QUE HASTA HOY ME HAN 

LEVANTADO CON UN RESPLANDOR DEL SOL EN UN 

HERMOSO AMANECER, AMO CADA MAÑANA AL MEDIO 

DÍA EN QUE EL SOL OCULTA MI SOMBRA, AMO CADA 

TARDE EN QUE LA BRISA BAÑA MI ROSTRO CON LA 

FRESCURA DE MI MAR, AMO EL ATARDECER EN QUE EL 

SOL PRETENDE ESCONDERSE DE MI PARA NO VER COMO 

ENAMORA A LA NOCHE QUE SE TORNA DULCE, 

MELODIOSA Y ROMÁNTICA, AMO LA NOCHE ADORNADA 

DE ESTRELLAS QUE AUNQUE NO LAS VEA, SE QUEDARON 

GRABADAS EN MI MENTE LAS NOCHES EN QUE 

ACOSTADO EN EL SUELO DE LA TIERRA NORTEÑA LAS 

CONTABA Y PRETENDÍA AGARRARLAS EN MIS MANOS, 

AMO MI SANGRE AQUELLA QUE ME DIO LA HERENCIA 

DE LOS MÍOS Y LA SANGRE DE MI SANGRE EN MIS 

HEREDEROS QUE SIGUEN SIENDO NIÑOS, AMOS LAS 

MEDIAS NOCHES QUE ME DESPIDEN DE UN DÍA PASADO 

CON ALEGRÍA Y ESPERANZA EN OTRO MEJOR, AMO LA 

MEDIA NOCHE QUE ME ANUNCIA EL CUMPLEAÑOS DE 

ALGUIEN Y QUE ME HACE FELIZ, EN FIN AMO EL DÍA QUE 

ME TOCA NUEVAMENTE LEVANTARME PARA DISFRUTAR 

LA VIDA QUE HOY DISFRUTO ESCRIBIENDO AQUÍ.

En un día como hoy: Hego Arrunátegui Espinoza.

TUS MIEDOS


T U S   M I E D O S


Vivimos en un mundo, que cada día convulsiona por muchos motivos, pero, que en cada una de esas convulsiones nos deja una cicatriz que queda grabada en nuestra mente, como para no olvidar nunca un hecho que nos sacudió tanto, que esa cicatriz nos hará recordar, que cosa es lo que ya no debes hacer para, no desencadenar una de las convulsiones con las que vivimos en nuestro mundo.


Somos seres instintivos que reaccionamos ante una serie de hechos de forma sorprendente y que nos da la seguridad de mantenernos con vida, porque ese instinto fue el que te avisó que algo pasaría, y esto te pone en alerta. Aún cuando estas reacciones nos ayuden un poco, no podemos pasar por alto que nuestros temores están dentro de nosotros y saldrán a flote cuando te sientas agredido por algo o por alguien que pueda ocasionarte daño a tu propia vida y salud.

Los miedos que a veces nos dominan y que no podemos controlar son aquellos que te los provoca una tercera persona o varias, ellas son las que lo generan de diversa manera, pero, siempre con un solo fin, que es el de controlarte o controlar tu vida y tus propias decisiones, para que estas ya no sean tuyas, sino, que por la presión de esta gente te obligan a ser otra persona "obedeciendo" lo que ellas te imponen, siempre bajo la amenaza de dañarte a ti o a quienes más quieres en tu vida.

Cuando la vida a veces te arrincona así de esta manera y no encuentras una salida, porque tu mundo se ve turbado, entonces tus miedos afloran en toda su intensidad y te hacen retroceder en todo aquello que habías logrado tener, como fortaleza, confianza en ti misma, iniciativa, fe, pundonor; todo esto desaparece cuando tu mundo se ve violentado por un acoso casi permanente contra toda tu existencia. Cuando esto ocurre te sientes la persona mas débil de todo el mundo, porque quienes te agreden se encargan de minar tus defensas y te someten a una andanada de injurias que inventan para desmoronarte y de esta manera tomar las riendas de tu vida para hacer lo que ellos quieren de ti.



En estas circunstancias, el temor te invade de tal manera que no puedes contarle a nadie lo que te pasa, casualmente por que ese mismo temor te lo impide tratando de proteger a los que te rodean y más quieres. Cuando te ves desarmado así de esta forma y todos tus temores hacen mella de tu propia identidad, llegas al extremo de decirte que ya no puedes hacer nada y te abandonas a la entrega de los que han minado tu personalidad para adueñarse de tu voluntad y hacer lo que esas personas desean de ti.

Cuando esto ocurre, debes recurrir en tu ultimo instante de voluntad, a aquellas persona que te dieron la vida y volver a confiar en ellas, por que son el mejor salvavidas que tienes. Si te pusieron en contra de ellos debes comprender que ellos te dieron la vida y que siempre ante cualquier dificultad o problema, siempre estarán a tu lado. Es en ese grito desesperado en que encuentras la salvación y la libertad de volver a ser tu mismo, y comprenderás nuevamente que la fe no puede perderse nunca, y que la confianza en lo mas cercano que tienes a tu lado serán aquellos que te dieron la vida, y darían gustosos la suya para que tu prevalezcas por encima de todo.


Debemos aprender a recuperar el valor y la fortaleza en nuestras vidas aun cuando te la han minado tanto, que pensaste desfallecer, teniendo en tu mente solamente la imagen que más queremos en la vida y es la de nuestros padres, que ahora deben saber que nunca los abandonaran, y es allí en donde tu propia vida volverá a surgir  y solo tendrás un cometido, en este nuevo momento, que echarte a andar nuevamente, para que tu vida surga, como un nuevo y gran amanecer.


En un día como hoy 28 de junio del 2014: Hego Arrunátegui Espinoza.