lunes, 5 de enero de 2015

UN FINAL FELIZ

              UN  FINAL  FELIZ

Nuestros padres nos forman desde niños para que podamos enfrentar los retos que en el camino se nos van a presentar. Tratan en lo posible que estas enseñanzas sean asimiladas por ellos para que tengan una base de integridad que les permita afrontar con éxito los diversos problemas que se les presentaran a lo largo de su vida.

En el camino de los padres está siempre presente la educación que les dan a los hijos para que sean profesionales y tengan todas las facilidades para realizarse como tales y formar en el futuro su propia familia. 


Llegar a una situación como esta les cuesta a cada padre un gran esfuerzo y sacrificio de muchas cosas, para que la educación se convierta en una buena inversión familiar y la herencia que se les deja a los hijos para que continúen sembrando las semillas que harán mucho mas grande la familia formada.


Lo que siempre se espera es eso, que toda familia con el avance de los años tenga un final feliz y digan los padres que han sembrado y ahora pueden estar satisfechos de la labor que hicieron. Este final feliz que siempre esperamos, muchas veces no se da en todas las familias, la falta de oportunidades o el no aprovechamiento de las que se te presentan no permiten que otras familias puedan tener las mismas oportunidades, y van deambulando de un trabajo a otro y de una casa  a otra sin poder llegar con el paso de los años a un final feliz como siempre todos lo soñamos.



Cuando a los hijos no se les da en forma completa la educación que requieren para enfrentarse a la vida, bien preparados, es cuando empieza el problema de que hacer si la preparación que se le dio no es suficiente ante los requerimientos exigidos. Nos encontramos con una situación muy difícil, cuando mucha veces y en un sin numero de casos los hijos al no tener los ingresos suficientes, se quedan a vivir en la casa  de los padres y se convierten en otro problema al no tener, ese padre, un lugar, por el momento, adonde ir.

En esta parte del camino, son pocas las manos solidarias para apoyarte, ya no está mucho la familia, y a veces, ya no están los amigos, ya no están los empresarios que te estimen y te dejen continuar trabajando. Donde quedó entonces la solidaridad? cuando el mundo te dice que cada quien con sus problemas y te abandonas a su suerte, porque tu te alejaste de quienes te ayudan, y te sentiste soberbio, y eso fue un descuido, pues, se piensa en vivir solo el  presente y nos olvidamos del futuro, pero allí esta la familia, nunca se fueron, tu dejaste de pelear y te marchaste, pero ellos están allí.



No todas la personas llegan a tener un final feliz, tan rápido, al deambular de un lado a otro, con la vida de su familia en el limbo y con la desesperación de no poder hacer mucho, por que la edad ha ido consumiendo cada año la energía y la iniciativa de aquellos padres que se dedicaron solo a trabajar y trabajar, para otros, sin haber pensado en su propia situación personal. 

Aquí entonces, pensamos, no habrá nunca un final feliz, y cada quien partirá, con una tremenda pena abandonado por todos, pensamos, y dejando casi en la orfandad  a quienes llevan tu sangre, tu propio nombre y a quienes hemos visto crecer y ahora en el final del camino, ver que no tendrán de repente un final feliz, pensamos, pero, las manos solidarias existen, y se van abriendo una por una para extenderla y llegar a tocar de nuevo tu corazón y decirte aquí estamos, no estas solo, la vida no es la misma sin el amor de los que uno más ama, y saldrán las ganas de luchar aún más, hasta llegar a conquistar tus anhelos y tus deseos de superación tan soñados. Esa es la vida que nos enseña en una gran lección de padres e hijos como se debe combatir y luchar en esta vida, teniendo tu propia decisión de mejorar y aceptar la mano solidaria de quién te la extendió, para decirte, sigue adelante, aquí estamos, caminemos juntos, y comprendemos entonces que nunca hemos estado solos, ocurre sencillamente, que nos apartamos del camino  de la familia y de los amigos, y al comprender lo que hemos hecho, tomamos entonces la decisión de ser felices y re emprendemos en el nuevo camino nuestra lucha por la vida y nos echamos a andar.

En un día difícil como hoy 05 de enero del 2015 : Hego Arrunátegui Espinoza.

viernes, 2 de enero de 2015

LA VIDA SIGUE IGUAL.

           LA VIDA SIGUE IGUAL


Cada año que termina y el nuevo que empieza es despedido con una tremenda algarabía en todo el planeta, desahogamos todas nuestra frustraciones, como celebramos todos nuestros logros, lo despedimos siempre con la esperanza prometida de que el siguiente sea un venturoso, prospero, y feliz año.



Al recibir el nuevo año, nuestra alegría nos desborda al extremo de olvidar todo lo acontecido en el anterior, solo se vive ese momento, ese presente, que nos llena de una gran esperanza en que todas las cosas que emprendamos deberán ser exitosas, por el esfuerzo que estamos prometiendo de que así sea.

Esos instantes de algarabía no se siente por igual en todas las personas, teniendo en cuenta que a veces lo prometido que haremos para un siguiente año no se pudo concretar, habiéndole puesto todo nuestro esfuerzo para lograr nuestro cometido, no habiendo sido así, es por eso que no todos reciben con igual algarabía un nuevo año, porque saben que la vida seguirá siendo igual, como lo fue el año anterior, con los mismos problemas, las mismas desilusiones, los mismos sinsabores, que no nos ha permitido volver a prometer tanto como en otros años.

La vida sigue siendo igual, es una expresión quizá, conformista, pero el hecho de que digamos eso, es por el motivo en que el esfuerzo por salir adelante lo ponemos con toda nuestra energía, pero, la otra parte,o sea,  las personas, instituciones, empresas o familia, no piensan igual que nosotros y no apoyan el derecho que tienen muchas personas por salir adelante y mejorar en su condición de vida, poniendo siempre trabas para que eso no ocurra y para que la vida siga siendo igual en todos los años que vengan. 

Estas son a veces las razones que pensamos porque un año nuevo creemos que será igual al anterior; por las mismas posturas que adoptan aquellas personas que tienen el dominio de todos los medios para producir y producir, solo pensando en el lucro personal y no en la mejoría de quienes aportan con su esfuerzo y dedicación a sus labores, toda su entrega, para que una empresa o una persona puedan obtener los grandes beneficios y logros que siempre esperan al final de cada año.

En cada año nuevo, sin embargo, seguimos depositando nuestra esperanza, en nuestro esfuerzo y capacidad para permitirnos avanzar y demostrando a todas las personas, que mantenemos ese brillo de amor por los nuestros, que dejaríamos la vida, por ver que ellos sean felices, y para que vean en cada uno de nosotros nuestra entrega, para que tengamos en nuestros hogares un poco de felicidad en cada año, para ir construyendo mejor nuestro mundo del que dependen todos a quienes amamos.


Que la vida no siga siendo igual, es lo que deseamos en cada nuevo año y que tengamos siempre la esperanza en nuestra capacidad, dedicación y esfuerzo en  cambiar para mejorar, para que la vida no siga siendo igual, y que mejore desde una nueva perspectiva la condición humana, para que la armonía y la felicidad ingrese a todos los hogares de la Tierra.


En un día como hoy, 02 de enero del 2015 Hego Arrunátegui Espinoza.