sábado, 25 de enero de 2014

AVANZA PA ATRÁS


                AVANZA   PA'   ATRÁS


En todos los momentos de nuestra vida siempre vamos a recordar que nuestros padres nos han guiado en todos los pasos que hemos dado desde nuestra infancia, para darnos desde casa los primeros conocimientos acerca de las cosas que debemos aprender para integrarnos al mundo de los que ya caminan por si solos y los que al mismo tiempo empiezan por decir sus primeras palabras.


Nunca ha sido sencillo para nadie, educar a sus hijos en los aspectos de la vida diaria, decenas de cosas que hemos aprendido y otras que las hemos repetido con el ejemplo de nuestros propios padres de como criar bien a nuestra  familia. 


Pero lo que si recordamos es que con cada año que iba pasando sabíamos muchas mas cosas que el año anterior, que en cada cumpleaños las recordábamos, siempre alardeando de como habían sucedido tantas cosas y como los hijos fueron aprendiendo muchas cosas nuevas y de como nos sentíamos orgullosos de ello.

El ir avanzando año tras año en la educación de nuestros hijos nos fue dando la madurez para recomendarles sobre ciertos problemas que tendrían en el camino, la escuela primero, la primaria y la secundaria y después la superior. Ellos fueron aprendiendo que en la vida se debe siempre avanzar para adquirir muchos y mejores conocimientos, para enfrentar solos después, a todo lo que se llame desafío.

Después de los estudios o durante ellos nos desempeñamos en varias empresas, de consumo, de servicio, extractivas, constructoras y todas aquellas que nos dieron una oportunidad de laborar para poner en práctica los conocimientos adquiridos.


Empezamos a trabajar pero a la vez vamos conociendo el interior de las empresas, como se manejan y como se administran los recursos materiales y humanos, los profesionales saben valorar el recurso humano con el que trabajan y es la forma correcta de hacerlo, en el buen trato y en la reciprocidad de la labor encomendada.

Sabemos muy bien que existen gran cantidad de empresas formadas de una manera informal, en donde los lideres que las dirigen lo hacen solo con el criterio simple de ganar y ganar, y esto a como de lugar. Empieza entonces aquí la gran transformación de tus ideales de superación cuando los empresarios que no fueron formados academicamente, solo hacen prevalecer su criterio y no el profesional que le dan las personas contratadas para llevar adelante la empresa para la cual laboran.


Cuando en una empresa prevalece solo el criterio personal del empresario y no el profesional, se dice claramente y lo dice este empresario, que nadie esta seguro, que a cualquier falla, se pueden ir, o lo que es peor, allí recién se dan cuenta que no tienes derechos laborales, allí, en ese lugar, porque pueden prescindir de tus servicios tal y conforme ocurría en el siglo dieciocho. En las empresas serias y respetuosas del recurso humano no se mantiene al recurso humano en vilo o con la incertidumbre de ir a laborar todos los días pensando quizá, que ese será tu último día trabajando

Lo aprendido en la Universidad donde quedo, no lo se, pero lo que si se puede vislumbrar es que todavía en este tipo de empresa no se sabe avanzar y no se puede avanzar al ritmo de lo que la sociedad nos exige, no se capacita a nadie, no hay promociones relevantes y no hay un camino que seguir, pues la misma realidad te ha enseñado que en este tipo de empresas se maneja el criterio obsoleto, de que nadie es imprescindible y por lo tanto se puede ir o se puede despedir  a cualquier recurso humano solo por la decisión personal de hacerlo.


Hemos avanzado tanto para llegar a esto, creo que no, pero es una realidad que se vive a diario en un país como este, o sea, hacemos como  dicen los chóferes y conductores de unidades públicas de transporte, avanza pa´atrás, y no parece una mala  forma de decir algo, sino que si merece que pensemos que mientras muchos avanzan para salir adelante y mejorar, otros se estancan  y no avanzan, pero si avanzan, pero para atrás.

En un día como hoy de verano: Hego Arrunátegui Espinoza

sábado, 18 de enero de 2014

LOS GRITOS DEL SILENCIO


                   LOS GRITOS DEL SILENCIO


En todas las etapas de nuestra vida pasamos por una serie de cambios que nos permiten ir renovando en nosotros nuestra forma de pensar y de actuar para sintonizar con el cambio que se va produciendo en la sociedad por todos los avances que se experimentan en todos los aspectos de nuestra vida.




Es extraordinario cuando después de tanto tiempo, y en silencio, nacemos y vemos la luz del mundo, y el silencio deja de serlo y se convierte en una gran manifestación de amor, del grito de la vida que hace al silencio admirarse por tan estentóreo llanto que nos dice a todos, aquí estoy he nacido.

En nuestra vida que la andamos todos los días, vamos viendo en cada persona, momento, o lugar una gran cantidad de situaciones que a la vista son muy agradables, por ver a gente muy feliz, pero, también observamos que muchas otras tras una una forma agresiva de trato, no dicen nada y solo nos queda pensar en la debilidad de aquellas personas que así, responden a esa agresión, solo con el silencio, sin que sus labios logren pronunciar palabra alguna.



Vemos estas situaciones no solo en los lugares por donde andamos, sino en los lugares que pensamos deben ser agradables para nosotros, como nuestra escuela, nuestra universidad, nuestro centro de labores, nuestras empresas, allí se observan también muchas situaciones en donde la persona es agredida no solo con palabras sino, también con actos y actitudes que te dicen, estas mal, no haces las cosas bien, no mereces un buen calificativo, o estas bien con tu sueldo no exijas más. En todas estas situaciones, muchas de las personas involucradas en ellas no tienen una respuesta, y es el silencio el que les dice, no puedes hacer nada, así es la vida.

Es decepcionante cuando ante tanta injusticia, no haya en muchos una palabra de respuesta que permita que todo lo malo que nos acecha pueda cambiar, pero, no siempre han tenido que ser las cosas así, sino, que la historia nos ha enseñado que los seres humanos hemos luchado siempre por cambiar las cosas para poder sentirnos escuchados en nuestras exigencias de una mejor vida para cada uno.


Cuando ya el ruido del mundo se va acallando y no hay voces en las calles que digan lo que sienten, entonces seremos testigos de todos los gritos del silencio guardado por mucho tiempo en nuestros corazones, y saldrá por fin la voz y la palabra para decir basta, basta ya de tanto abuso, hasta aquí les permitimos a quienes dominan todos nuestros estados de animo y nuestros sentimientos, al no permitirnos avanzar, no más, y es entonces que el grito de uno se convierte en el grito de muchos, y el grito de muchos se convierte en el grito de todos, si, de todos los que hemos guardado silencio tanto tiempo, para decir, es nuestro momento, nuestra hora, y los gritos del silencio se escucharan hasta el espacio para decirle al mundo que más de la tercera parte de sus habitantes no se siente contento con el trato que nos están dando nuestros gobernantes, de repartir la riqueza de la tierra en forma desigual.


Queremos un mundo sin diferencias, queremos un mundo en donde los desheredados de la riqueza que producimos, seamos parte del mundo que si disfruta el tener lo que todos ansiamos, la libertad de sonreír, de gozar, de gritar nuestra felicidad sin que no nos falte nada y poder dejar en nuestros hijos la herencia de un mundo con igualdad, sin discriminación y con pleno derecho a la libertad de disfrutar de todo lo que producimos. Entonces los gritos del silencio ya no lo serán porque han gritado como en cada nacimiento nuestro, y ese grito es el grito de la felicidad de amar a la vida y amarla con la libertad con que nacemos y en igualdad de condiciones.

En un día como hoy: Hego Arrunátegui Espinoza




domingo, 12 de enero de 2014

ESAS PEQUEÑAS DIFERENCIAS.


          ESAS PEQUEÑAS DIFERENCIAS


Vivimos en un mundo que nos cobija de tal manera que al darnos todo, solo tenemos que recoger, explorar, perforar, pescar, cosechar, todo lo que nos permite vivir y construir con nuestro trabajo el mundo que necesitamos para hacer de nuestras vidas lo que como seres humanos siempre hemos aspirado tener, un albergue y paz para avanzar y tener mayores comodidades dentro de las oportunidades que se nos presentan y ser mejores en cada día.


Nos educaron diciéndonos que todos tenemos las mismas oportunidades para salir adelante, pero desde que empezamos a estudiar, esas oportunidades no las encuentras siempre en tu camino, sino que debes buscarlas para que te abran las puertas primero para una buena educación y luego a buscar como seguir sobreviviendo.


En este mundo que se nos presenta muy fácil el vivir, no vemos la realidad, sino, hasta el momento que algo nos hace ver que este mundo no es aquel que nos dijeron, en el que todos teníamos las mismas oportunidades, sino, que salvo algunas pequeñas "diferencias" todos tenemos que luchar por salir adelante.


Son casualmente esas pequeñas diferencias que todos a veces queremos esconderlas las que hacen del nuestro un país con mucha desigualdad, o sea que no todos tenemos las mismas oportunidades para vivir, para estudiar, para trabajar, para aliviarnos de nuestros males, en fin, esas pequeñas diferencias que así se nos ha dado por llamarlas para sentirnos aliviados un poco de las culpas que tenemos por ser parte  de este sistema  que nos hace acentuar esas diferencias para alejarnos más de aquellos que no son como  "nosotros".


Sin embargo si vemos las cosas desde otra perspectiva, desde donde  las ven los que sienten esas diferencias, ellos las sienten y las ven tan dolorosamente que en el tiempo se han convertido en una gran desigualdad, que los ha separado en una tremenda  brecha social, con quienes manejan los medios que permiten educarte, darte trabajo, formar una pequeña empresa ambulante, y los que venden las mercancías que nos permiten sobrevivir.



Esas pequeñas diferencias que nos separan son las que transforman nuestro país en muchos sectores de producción, que en la necesidad de tener todas las cosas que cada familia y cada individuo necesita, vende todo su esfuerzo por una escasa remuneración que solo lo convierte en una persona descontenta por no haber tenido o aprovechado las oportunidades que se le presentaron en un momento  de su vida, tal y conforme se lo dijeron.



Por consiguiente debemos deducir que por esas pequeñas diferencias tenemos un país que no es unido, ni tan solidario, solo porque en esa gran desigualdad que existe, casi  nadie te tiende una mano para ayudarte, sino, que te enfrentas solo a un mundo que hace añicos todo tipo de esperanza que puedas albergar en tu corazón. Así de esta manera no podemos construir un país unido, sino, que nos enfrentamos cada día con el dolor de esas pequeñas diferencias, que hacen de la desigualdad un país discriminador en todos los aspectos.




Que esas pequeñas diferencias que nos enferman y que a la vez nos separan, las podamos comprender en todo el sentido de su realidad y que aunemos esfuerzos en no seguir profundizándolas, sino, que aprendamos de ellas  acercándonos a quienes son diferentes a nosotros, por cuestiones de origen, educación, formación, color de piel, para tratarlos mejor y evitar que esas pequeñas diferencias nos sigan consumiendo poco a poco como país y nunca sentir que somos parte de una verdadera nación.



En un día como hoy 12 de enero del 2014: Hego Arrunátegui Espinoza 





CUANDO LOS AMIGOS SE ACABAN.


          CUANDO LOS AMIGOS SE ACABAN

En el transcurso de toda nuestra vida, desde que somos niños, siempre hemos tenido al lado nuestro, no solo a nuestros padres, sino que ellos han hecho todo lo posible por buscar  a otras familias que tienen sus hijos para que sean primero, compañeros de juegos de sus  hijos.

Pero cuando los años pasan y los hijos van creciendo, nuestros compañeros de juegos se han convertido ya  en algo muy especial, y ahora se llaman, amigos, y serán aquellas personas que desde nuestra niñez nos acompañaran en todos los años que tenemos para gozar de esta vida que se nos ha otorgado.


Conocemos en cada etapa de nuestras vidas a tantas personas, varones y mujeres que con el trato constante se convierten en aquellas personitas que siempre estarán a nuestro lado y serán nuestros amigos, y sobre todo les diremos nuestros mejores amigos.


Todos ellos formaran parte de nuestro mundo, aquel que no podrá ser nuestro si es que nuestros amigos no forman parte de el, pues, ellos han crecido con nosotros y han estado y estarán en cada momento de nuestros logros y de nuestros pesares.

Sin embargo, al margen de toda esta bella amistad, con el transcurrir del tiempo, y cuando ya no eres  un infante, ni un adolescente, ni un adulto joven, y ya mucho mayor, te das cuenta, que has compartido casi toda tu vida con ellos y forman casi parte de tu familia, a quienes los visitas y te visitan como parte de una buena vida que la has vivido con pasión.


Cuando los años han seguido pasando y las familias fueron creciendo, muchos amigos se alejaron o se aislaron, muchos lo hicieron después de compartir los años del colegio, de la universidad, del trabajo, del barrio, y lo fueron haciendo de a poco, hasta llegado el momento en que ya no tenias a quién visitar o con quien hablar.

Esto, es lo duro de la vida, cuando en un momento determinado en que necesitas de todos ellos, muchos te dan la espalda y ya casi ni te recuerdan. Entonces te viene a la mente aquello que un día pensaste ¿se acabaran algún día los amigos? y tu respuesta es tan obvia, que sigues sentado en la banca de aquel parque, solo, y respondiéndote que si, que los amigos se
acaban.

Cada uno se va alejando en cada etapa, en cada periodo, en cada momento en que no te das cuenta, que uno se fue, porque, tenías muchos más. Es entonces que te das cuenta que al perder al primero, luego vendrá el segundo y el último ya ni siquiera te recuerda.

Cuando los amigos  se acaban es porque hay una razón para que eso haya ocurrido, y una verdadera razón es que tu mismo te aislaste de tus mejores amigos porque quizá, te sentiste realizado con otras personas y te fuiste olvidando de los amigos, aquellos que siempre estuvieron contigo y que ahora no te invitan ni siquiera  a la reunión de los amigos del colegio, ni del barrio, ni de los cumpleaños, ni los aniversarios, porque te los perdiste todos.

Ahora ya después de muchos años, sin amigos, y con solo las calles de tu ex barrio y de uno, y de cientos de lugares, al igual que de muchos parques,  que son testigos de tus andares y de tus pensamientos, estos en su silencio, son los que te dicen y te responden, ahora,  que los "amigos, si se acaban" y eso es muy duro y muy triste.

En un día como hoy: 12 de enero del 2014 Hego Arrunátegui Espinoza