EL PODER DE LA MUJER.

EL PODER DE LA MUJER

Cada vez que recuerdo mi infancia, no puedo dejar de ligarla a mi hermana menor, y la ligo siempre a mis recuerdos, porque en mi mente siempre me quedó grabada aquella expresión que mi madre me repetía casi hasta el cansancio "¡No te metas con tu hermana! porque sino ya sabes! y ese ya sabes, significaba una paliza fija, un pellizco fijo, desde esa época sabia ya, que no debía meterme con las mujeres, porque, según ella,  eran delicadas, lloronas, quejosas y engreídas  si engreídas  claro, ejemplo, era mi hermanita.

Que tiempos aquellos en que me desahogaba molestando a mi hermanita, la tenia completamente dominada  y yo me decía  así tiene que ser con todas las mujeres que conozca porque papá, así me lo decía.

Los años fueron pasando, en el colegio me volvieron a repetir el sagrado rito de la delicadeza de la mujer, que era el sexo débil del y que no se le debía tocar ni con  pétalo de una rosa, pero, por otro lado era, todo al revés.

Las mujeres crecieron pensando eso, y que nosotros los hombres no podríamos nada con ellas, pero, siguieron creciendo, y como autodefensa adoptaron las técnicas de los hombres, contra los propios hombres, pero manejadas y mejoradas por ellas, con la mejor sutileza que este planeta haya conocido, ¡Oh! ¡Dios! ¡La Mujer!.

Siempre protagonista de la historia de todas las épocas,  si hasta en esta época contemporánea, en que ellas no detentaban el poder, en empresas, negocios, industrias, ni colegios, ni estados, se acuño la siguiente frase "Detrás de un gran hombre, siempre hay una gran mujer" o sea que las mujeres, siempre o casi siempre, o quizá  de vez en cuando, han estado detrás de los hombres, pero, luego pasaron a estar a su lado.

Eso es lo que nos han hecho pensar siempre, o acaso no se acuerdan de eso, "no te metas con tu hermanita..." osea que siempre nos hemos creído que casi todo el tiempo las mujeres han estado bajo nuestro "dominio" pero no es así,  es que los hombres a veces, nos las creemos todas, porque pensamos que somos únicos y que solo nosotros podemos conquistar a una mujer, dejarla plantada, abandonarla no serle fiel, salir con una y con su reemplazo.

Pero, no, las mujercitas, crecieron, aquellas de quienes pensamos que las dominábamos completamente, cambiaron, y no es así,  no las dominamos, no lo hacemos, ¡Ellas nos dominan! y no crean que esto nos hace felices, pero creo y es así  que esa es la verdad y existe aunque no lo  queramos creer, ¡El Poder De La Mujer! Sobre todas las cosas que rodean su mundo y dentro de ese mundo nos encontramos los hombres, dominados de alguna manera por ese bendito Poder de La Mujer.

Pero¿Este poder de donde nace? ¡De donde salio? Saben de donde? de ese singular don que siempre les ha permitido estar un paso adelante de los hombres, y de ese singular don que la naturaleza les ha dado, y si se puede, llamar don es entonces, la sutileza de su ser, su sensibilidad, su capacidad innata y además su tierna y hermosa coquetería  que es una de las cosas más hermosa que tiene una mujer, y en todo eso radica su gran poder, porque por una bella sonrisa de ellas, tu les dices Si! porque quedas encantado, y con un guiño de ojos y con un ademán, aceptas lo que tu quieres rechazar, y por un par de lágrimas de ellas, le vendes tu alma a ese poder y a esa hermosa mujer que tu creías que la habías conquistado. 

¡Pero no! ¡Despierta! Ella te conquistó, y aunque nunca lo vas a decir como nosotros lo decimos, ella solo sabe que gano esa batalla, por que cada vez que quiera algo, tu le dices ¡Si mi amor! ¡Lo que tu quieras! con tal que tu obtengas lo que quieres y ella obtiene lo suyo.

Y siempre seguiremos creyendo que las tenemos dominadas, cuando son ellas con ese poder inmenso que tienen, quienes nos "dominan", pero si hay que ser dominados para obtener una bella sonrisa de una dama, una buena opinión y una grata mirada, entonces creo, que me gusta ese poder, el poder de la mujer, el poder de la sensualidad, el poder de la coquetería  el poder de la hermosura y el poder de siempre estar un paso delante de todos nosotros y el poder que tienen siempre de hacernos decir ¡Si! con una bella sonrisa, un gracioso coqueteo una sensual mirada, y una gran capacidad de dominarnos.

Y ahora ya no están a nuestro lado, pasaron a estar delante de nosotros, los benditos hombres, los dominadores por siglos de todo ser viviente en este planeta, porque?  porque el poder de la mujer, ahora nos domina ¿verdad mi amor?

En un día en este tiempo, 9 de octubre del 2013: Hego Arrunátegui Espinoza.