EL TIEMPO ESE TIEMPO

                                            EL TIEMPO ESE TIEMPO

Todos nacemos en un espacio y un tiempo determinados, el cual se nos fecha según este momento y es a partir de allí en que  somos parte de un mundo al que estaremos sujetos por ese instante, en que vimos la luz del mundo, al tiempo que tendremos que pasar minuto a minuto y del cual estarán pendientes quienes tuvieron la felicidad de traernos a este mundo.

Desde entonces toda nuestra actividad estará ligada a cada momento de la vida de nuestros protectores, quienes nos enseñaran todas las cosas básicas para que vayamos  asumiendo lo que significa la libertad de poder hacer algún día las cosas por propia voluntad y a nuestro criterio. 

Los años pasaran  casi sin darnos cuenta, y nos encontraremos en una etapa en que todos nuestros asuntos solo dependerán de las decisiones que tomemos para continuar con la vida que elegimos seguir. Cuantos hechos y sucesos pasaran por nuestra vida, diremos que muchos y cada uno de ellos, tendrá que ver con ese instante en que se produce, y que solo te lo hará recordar el  tiempo, ese tiempo, que nos dará el momento exacto de ocurrido  estos hechos.  Si, ese tiempo que siempre hemos esperado para todo, y que hoy cuando ya hemos dejado de ser adolescentes nos enfrenta a un mundo en que el tiempo lo decide todo.

Si pudiéramos regresar en el tiempo, y con la experiencia que tenemos, lo haríamos solo para ajustar a nuestra vida los momentos que nos resultaron difíciles después de tomar una decisión, y que no fue la adecuada, y entonces cambiar ese instante y que nuestra vida de un buen giro y nos de una nueva oportunidad. Eso es lo que desearíamos hacer de ser posible, pero, el tiempo, ese tiempo, en el cual vivimos cada instante, no puede cambiarse.

Pasamos por tantas cosas felices en nuestra vida que a veces solo recordamos las malas experiencias, y es por estas que nuestro mundo se ve turbado porque no tuvimos el tiempo necesario para poderlos culminar, ni el tiempo para poder cumplir, quizá, una promesa.

El tiempo que tenemos lo dedicamos a prepararnos para todo, pero cuando ya lo estamos, necesitamos más de este, para adquirir mejores herramientas y enfrentarnos  con más decisión a los grandes problemas que nos pone la vida y a la que enfrentamos desde muchos frentes, como estudiante, como profesionales, como hijos, como padres y en donde cada momento tiene su propio cursor por donde debemos dirigirnos y aprovechar el tiempo para el cual nos preparamos.

El tiempo, ese tiempo que pasamos siempre buscando todo,y esperando todo, es el que nos impide muchas cosas. El tiempo que hemos pasado hasta hoy ha determinado que hagamos las cosas justas, pero, no todo ha sido así  aunque le hayamos imprimido a cada decisión toda nuestra capacidad, es por eso que cuando algo nos sale mal, le reclamamos al tiempo que no tuvimos para poder hacer las cosas mejor. El tiempo, ese tiempo del que tanto hablamos nunca lo sabemos utilizar como lo pensamos, si así fuera, todos seriamos felices y viviríamos en un paraíso en donde todo sería perfecto, pero, siempre nos faltara tiempo para todo en la vida, porque nunca haremos lo necesario para complacer todas nuestras expectativas.

Ahora en este momento pensaríamos , como hubiera podido tener el tiempo suficiente para poder haber hecho esto, o hacer mejor aquello, pero, no podemos retroceder este tiempo y no podremos cambiar nada, solo educar mejor a quienes vienen a este mundo para que en el tiempo que tienen puedan lograr cumplir con todas las aspiraciones y deseos que les fueron enseñando, y lo puedan lograr.

El tiempo ese tiempo que nunca tendremos para cambiar lo pasado y tener en este presente lo soñado, es el que siempre pensamos que lo tenemos a nuestra disposición,  hasta, que una mañana cualquiera te despiertas mirando el mundo y te dan solo un instante para decir, adiós, y el tiempo ese tiempo, no te da ni siquiera, ese momento.

En un día como hoy: Hego Arrunátegui Espinoza