DAR PARA DAR

                                       DAR  PARA  DAR

Por mucho tiempo se espera a veces, que un día como hoy llegue y te de  la claridad mental para plasmar lo que siempre te has preguntado acerca de la solidaridad de los seres humanos en  dar sin recibir nada a cambio, en colaborar en cada actividad de apoyo a los que menos tienen o a los que sufren de alguna catástrofe natural o provocada por el ser humano.

En muchos años quise investigar que ha llevado a estas personas ser tan diferentes que dejan todo lo suyo para dar de si mismos su tiempo, su capacidad, su energía, para que otras personas puedan sentir un poco de alivio y sientan que hay amor en las personas que se entregan a esta noble labor de darlo casi todo, o todo, para que los demás puedan sentirse aliviados en sus penas y pesares.

Muchas de las personas que toman  esta labor como un acto de amor no se hacen conocidas por nadie, solo hacen este digno trabajo para compensar  las faltas de apoyo, entrega y dedicación hacia las personas que necesitan un apoyo moral una palabra de aliento y lo demás viene por compensación al ir llegando la ayuda material que se necesita para ayudar a quien quedo desamparado o que perdió algo o a alguien.

No es solo el hecho de dar sin recibir nada a cambio, sino la comprensión de lo que significa que el tiempo invertido, las energías gastadas, no se recuperarán jamas, pero, donde vive ese desprendimiento, tan generoso, solo en el dar es dar, no allí no, porque, solo nos quedamos en el definir algo y no necesitan hacerlo porque lo sienten como algo más profundo, que vive en el fondo de sus corazones y en su infinita capacidad de dar para dar, para entregarse y nunca cuestionarse por quien lo hiciste, solo el profundo sentimiento de sentirte bien  porque entregaste todo lo tuyo solo en dar para dar.

Ese gesto generoso de entrega que sale de una persona de donde sale o como nace, es difícil describirlo solo se siente,  y se siente de una manera que te deja una gran alegría dentro de tu corazón  que te deja alborozado a plenitud porque sentiste lo que vale el dar para dar, como un gran consuelo para tu espíritu que  luchará para que el amor y la paz viva siempre en nosotros, para no ver ni sentir que el  el tiempo pasará y no lo sentirás porque el amor hacia los demás pesará mucho más en tu vida.

En un día intenso como hoy: Hego Arrunátegui Espinoza.