DE MIL MANERAS
Decir mamá es decir vida, decir vida es decir gracias, y es un decir gracias de todos los días porque cuando todos los días te despiertas sabiendo que es una mañana hermosa para ti, lo hacemos pensando que esta vida te la dio el ser mas maravilloso del mundo que te amo mucho antes de conocerte, y que hablaba contigo mucho antes de mirarte a los ojos.
Decir mamá es decir gracias, y decir gracias es amarla de mil maneras, pues si contáramos las veces que ella te acarició cuando estabas en su vientre, en esa pequeña casita que te albergó durante nueve meses, creo que amarla de mil maneras se convertiría en hasta que yo muera, porque amarla de esa manera es amarla con el alma y el corazón en la mano. La amaremos de mil maneras hasta que las palabras se gasten, pero, nunca podremos dejar de decirle gracias, por que el sol amanece con ella y la luna alumbra su figura.
Debemos decirle gracias aun cuando no estemos cerca, porque la distancia mas corta entre una madre y su hijo es el corazón y el amor que los une, nunca jamas los separa, por que decirle gracias es susurrarle todos los días una canción que no tiene fin y que se convertirá en el canto más hermoso de todos nuestros días, y le diremos siempre gracias mamá por la vida que nos diste.
Gracias mamá por que cada vez que celebramos nuestro cumpleaños a veces pensamos que ese día es solo nuestro, pero cuando tu nos saludas es diferente, te abrazas a nosotros y sentimos en ti otra vez ese ritmo melodioso de tu corazón y te amamos aún con mas fuerza y de mil maneras, por que no solamente es nuestro cumpleaños el que recordamos sino que tu recuerdas con mucho más amor el día en que nos diste la vida.
Gracias mamá de mil maneras, por que de mil maneras te amaré aquí en la tierra como en el cielo.
En un día de mi vida, con el corazón en la mano. Hego Arrunátegui Espinoza.
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